Hablaron los vientos con las aguas
-enamorados-
sal ardiente reposada
en el corazón de las conchas.
Piel cobriza y tostada,
luz blanca y manos de madera
tejiendo redes en la orilla,
brisa que peina cabellera.
El que ha bebido,
las sonrisas sin letras
en la suave lluvia nocturna,
sabe del fuerte resonar de las olas
y del oído profundo de los caracoles
en las ávidas resacas.
Allí, donde los vientos murmuran
Allí, donde los vientos murmuran
sus andanzas
sobre los pechos de las montañas:
se escuchan cual gritos rotos,
al pie de tempestades.
El que ha leído, la palabra escrita
en la mirada muda,
ha sentido el aire sonriente
de las olas y mareas:
suspiro salado y espíritu de roca,
esperanza dorada de acantilado
que pinta atardeceres
en celestes mordientes.
Índigo de soles sin sombras,
sobrevivo
a tu espera
cual retazo de mar.
Copyright©MarianHeredia
4 comentarios:
Una delicia de poema...
Me encanto descubirlo... pasare a visitarte con tu permiso, Reme.
Un poema que ya te conocía, pero nunca deja de asombrarme, indiscutiblemente, lleva tu sello, la inherente calidad de tu cada poema.
Besos POETA.
Aplausos, aplausos, aplausos, aplausos...
Un fuerte abrazo para ti...
Gracias Siloe,Raúl,Salvador...me alegra verles por mis humildes letras y saber que no me olvidan..Besotes amigos
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