Te escribo desde el alma, adherida a ti cual hiedra,
bajo una débil línea de la luna nueva.
Asomada en el verde zaguán de la arboleda,
muy cerca de tus pasos, inclinada a la tierra.
Te escribo desde todos los rincones ausentes,
al amarte callada, desde todas mis fuerzas.
Te escribo desde el acorde de todos los cantos
que dejan los mirlos al asomarse a mis puertas.
Te escribo desde una mano que te alcanza a tientas,
inefable y dulce amor, que despierta a las piedras.
Te amo en el ir y venir, nada y todo en tus pasos,
al escribir tu nombre que se borra en la arena.
4 comentarios:
De maravilla el ritmo y los versos. Aplausos, poeta...
una poeta genial... ¿En q momentos te inspiras y sientes el verbo correr por la carnes??
mm delicioso... hatsa se logra escuchar la musica al compas de tus palabras!!
Bello
Yoyo
Gran secuencia versal donde exhibes un gran dominio del lenguaje poeta.
Mi admiracion y aplauso.
Besos.
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